Hoy por la tarde el kiosko de la catedral de Culiacán fue envuelto por una lona escrita en ella”Justicia para Javier Valdez” tras cumplir cinco meses de ser asesinado.
Ismael Bojórquez Perea, director del seminario RíoDoce, exclamó que el caso nunca será esclarecido y que las autoridades correspondientes están llevándolo al olvido.
Familiares, periodistas y amigos se organizaron para llevar acabo una pega de carteles por los al rededores de la catedral de Culiacán como muestra de exigencia para que se cumpla justicia.