Agenda Política-Jorge Luis Telles Salazar

En la parte culminante de la reseña de la crónica de una destitución largamente anunciada, el gobernador Rubén Rocha Moya separó a Luis Guillermo Benítez Torres de su cargo como secretario de Turismo del gobierno de Sinaloa, inmediatamente después de recibir la notificación del Congreso del Estado en el sentido de que iniciaría a la brevedad juicio político contra el ex presidente municipal de Mazatlán.
A su vez, el Poder Legislativo había dado curso a la petición -a través del Ministerio Público – de la Fiscalía General del Estado respecto a poner en marcha un juicio de procedencia en contra del tristemente célebre Químico Benítez, lo que implicaba, en automático, solicitar la anulación de su fuero como miembro del gabinete del gobernador Rubén Rocha Moya.
Por eso, el titular del Ejecutivo obró en consecuencia a fin de que Benítez haga frente al juicio como un ciudadano común y corriente y que ejerza, a la vez, “los derechos que la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos le otorgan, bajo el principio de la presunción de inocencia, en tanto no haya sentencia judicial que declare su responsabilidad en los hechos materia en la investigación que se le atribuyen”.
¿De que se le investiga al Químico Benítez?
De dos contratos de adquisición directa con la empresa “Azteca Lighting” por la adquisición de luminarias de manera irregular: una por 198 y otra por 2 mil 139, lo que presupone un daño patrimonial de más de 50 millones de pesos al ayuntamiento de Mazatlán. Según la Fiscalía “existen datos de prueba suficientes para ejercitar la acción penal”.
La decisión de Rocha Moya en la dirección de destituir a Luis Guillermo Benítez derivó en dos más:
-La designación de Estrella Palacios Domínguez como nueva secretaria estatal de Turismo, misma que fungía como subsecretaria de Promoción Turística, responsabilidad que le será transferida al subsecretario de Industria de Reuniones, Ricardo Velarde Cárdenas.
Y:
-Las indicaciones al secretario general de Gobierno, Enrique Inzunza Cázares, para remitir al Congreso del Estado una iniciativa de ley que retire el fuero tanto al jefe del Ejecutivo como a los secretarios del despacho, a fin de que ante una eventual acusación del Ministerio Público enfrenten a la justicia como un ciudadano común. Como cualquier hijo de vecino.
Y bien, tema que da para mucho, indiscutiblemente, pero nos quedamos, por ahora, con el seguimiento al detalle del caso Químico Benítez y la advertencia de la Fiscalía: “pruebas suficientes para ejercitar la acción penal”.
¿Qué le parece amigo lector?
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Por otro lado.
La Conferencia Nacional de Gobernadores vivió sus mejores momentos durante los gobiernos presidenciales de Vicente Fox Quezada y Vicente Calderón. Es decir: entre los años 2001 y 2012, cuando la época dorada del Partido Acción Nacional. Lamentablemente, hoy es solo un membrete que pretende re inventarse para convertirse en una herramienta más en favor del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y es que, con Vicente Fox, el PAN ganó la presidencia en el 2000 y con Calderón en el 2006; pero, contra lo que se suponía, en el curso de ambas administraciones el PRI logró sostenerse en la abrumadora mayoría de los Estados de México y fue así como mantuvo su paso victorioso en gubernaturas, presidencias municipales, congresos locales, senadurías y diputaciones federales.
Y si ya los resultados de las elecciones locales a lo largo de la docena azul garantizaban una especie de equilibrio político claro en el país, todavía, en ese marco, surgió la CONAGO como un abierto contrapeso al poder presidencial.
Cierto, al interior de ese organismo también había gobernadores panistas y de algún otro partido desbalagado por ahí; pero, en su mayoría, eran priistas, que no opositores recalcitrantes, que es otra cosa totalmente diferente. Los priistas, dejémoslo claro, no estaban ahí para estorbar al presidente, ni mucho menos para orquestarle un golpe de Estado sino para cogobernar en estrecha armonía y así obtener beneficios concretos para sus respectivas entidades y también para su causa personal, evidentemente.
Mal que bien, la ecuación funcionó y eso fortaleció a la CONAGO; pero, por alguna razón, el organismo vino a menos durante la administración presidencial de Enrique Peña Nieto y terminó por perderse, prácticamente, en la de Andrés Manuel López Obrador, quizás porque ahora, con extrañas excepciones, casi todos juegan en el mismo bando.
Así, recapitulamos, la Conferencia Nacional de Gobernadores es propiamente un membrete, que volvió a la vida tras su reunión del pasado día 05 y que ahora quiere re inventarse, seguramente para convertirse en un apoyo adicional al presidente López Obrador.
Acabar con las inercias en CONAGO es una frase que les cae, cierto, como “anillo al dedo”. La sacudida es inevitable.
Es por eso que el nuevo comité directivo de la Conferencia, encabezado por el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara (Morena) -quien lleva como segundo al de Yucatán, Mauricio Vila Dosal (PAN)- se comprometió a llevar a cabo una revisión integral, con el propósito de fortalecer el federalismo “a través de mecanismos democráticos, con respeto a las instituciones”.
El documento, producto de esta revisión, se hará del conocimiento público el 21 de marzo, en Oaxaca, en el nuevo encuentro entre los gobernadores de los Estados de nuestro país.
Y pues ya le contaremos.
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Por cierto.
En el marco de la reciente reunión de la misma CONAGO -la 63 de carácter ordinario- el gobernador de Sinaloa, fue nombrado titular de la coordinación del campo, lo que suena como un acuerdo elementalmente lógico; pero que no deja de ser un reconocimiento para Rocha Moya.
Esto se desprende, por supuesto, de la naturaleza propia de Sinaloa, como estado eminentemente agrícola y de sus aportaciones anuales a la producción nacional de alimentos de corte agropecuario. Rubén Rocha ha sabido mantener ese status a pesar de las recientes restricciones presupuestarias al campo, que han golpeado de manera directa a la agricultura sinaloense.
Ya antes, otros gobernadores sinaloenses habían sido objeto de tal distinción: Jesús Aguilar Padilla (qepd) y Mario López Valdez, en su momento. Cumplieron con el papel, sencillamente.
Si, en efecto, un reconocimiento para el gobernador de nuestro Estado; pero también una responsabilidad adicional puesto que a su agenda habitual agregará lo relacionado con la actividad agrícola, ahora ya no solo con la de Sinaloa sino también con la de otras entidades del país.
Enhorabuena.
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En tanto.
Antes de que el tema envejezca -por la velocidad que distingue ahora a los medios de comunicación – ineludible referirnos a la reciente visita a Sinaloa por parte de Ricardo Monreal Avila, la cuarta corcholata del presidente Andrés Manuel López Obrador para la candidatura presidencial por MoReNa; pero muy por debajo de los afectos que AMLO profesa por Claudia Sheinbaum, Adán Augusto López y Marcelo Ebrard Casaubón. Monreal giró por el puerto de Mazatlán, donde le atendió personalmente el gobernador Rocha, en acato a los lineamientos de la dirigencia nacional de su partido político.
Ciertamente no fueron los grandes eventos -ni por asomo similares a los que ha encabezado Adán Augusto o Claudia Sheinbaum-; pero, para ser la primera vez, con la advertencia de que volverá la primera semana de febrero, si fueron lo suficientemente efectivos para llamar la atención de los medios de comunicación, que de eso se trataba a final de cuentas.
Veamos:
Monreal Avila se dio su buen baño de pueblo, con su presencia en el Cocktelazo-2023, en el cual Mazatlán logró ubicarse como nuevo dueño del record Guinness, tocante al mayor coctel de camarón a nivel mundial. Fueron 1701 kilogramos del crustáceo, por encima de los 1485 registrados hace algún tiempo por la ciudad de Denver, Colorado. Evento celebrado en el Centro Internacional de Convenciones, con excelente asistencia.
También atestiguó la entrega de 15 camiones recolectores de basura por parte del gobernador Rocha al ayuntamiento de Mazatlán.
Y finalmente, fue invitado especial al informe del senador Raúl Elenes.
Tiene sus simpatizantes Monreal en Sinaloa; pero no se la ha presentado la oportunidad de mostrar el musculo, por las restricciones que si obran en su contra, a diferencia de lo que acontece con las otras tres corcholatas. Bueno el trato de Rocha, quien se mantiene cauto en cuanto a sus simpatías por determinado candidato presidencial. Y hace bien.
En cambio Monreal, sin nada que temer, no le regateó elogios a Rubén Rocha, de quien pronosticó será el mejor gobernador de Sinaloa porque tiene dos cosas que fortalecen su credibilidad: “su amor por el pueblo y su autoridad moral”.
Y se fue; pero vendrá pronto. Ahora si en serio, probablemente.
Pendientes.
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Mesa de análisis del programa noticioso Altavoz, de lunes a viernes, de 8: 30 a 9: 00 horas, a través de la Bella, aquí en Culiacán (104. 9 de FM) y todas las estaciones del grupo Chávez Radio en Sinaloa. Conduce Pablo Cesar Espinoza, con la participación de Altagracia González, Francisco Chiquete y quien esto escribe. Cuídense mucho y Dios los bendiga…)