- Se refiere cuando un grupo delictivo le exige dinero a una persona de forma recurrente, solo por tener un negocio o propiedad.
La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes en Tiempos de Pandemia ha denunciado un aumento significativo en el cobro de piso por parte de extorsionadores, con tarifas que oscilan entre $500 y $30,000, dependiendo del tamaño y las ganancias del negocio.
Este fenómeno se ha intensificado en estados como Michoacán, Guerrero, Zacatecas, Sinaloa, Baja California Sur, Tamaulipas, Nuevo León, el Estado de México y la Ciudad de México, donde se reportan los mayores índices de delitos relacionados.
La preocupación radica en la posible normalización de esta práctica, lo que implicaría que los empresarios y comerciantes tendrían que incluir en sus planes de negocio una partida para estos pagos extorsivos, considerándolos como una realidad inevitable en el país.
La ANPEC advierte que si esta situación se consolida, se estaría aceptando una condición de vulnerabilidad que podría tener consecuencias graves para la economía y la sociedad mexicana.